Enrique Iglesias desata la euforia en Marbella

Enrique Iglesias desata la euforia en Marbella

El cantante puso el broche de oro a su 'mini' gira española en Starlite Festival

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Poco importó a sus 'fans' que el concierto comenzara una hora más tarde de lo previsto o que entre el público se sentara la madre y hermanas del cantante o que su padre hubiera estado en el mismo sitio donde él iba a poner el pie anoche, al salir al escenario. La Cantera de Nagüeles fue una auténtica discoteca al aire libre antes, durante y después del concierto del artista español de mayor éxito mundial en la actualidad. Porque se nota que el joven Iglesias, que ya tiene 38 años, lleva ocho giras a sus espaldas. Y para recordar sus buenas cifras en ventas y en galardones, eligió el tema 'Tonight I'm loving you', que superó en el escalafón 'Billboard' al mismísimo Michael Jackson. La euforia se desató entre el público cuando Iglesias salió, con su gorra calada, un apéndice más de su fisonomía, camiseta negra de pico ceñida al cuerpo y pantalón vaquero. Lo único que enturbió el concierto fueron los estridentes fallos de sonido, que lejos de amedrentar al cantante, lo terminaron de provocar, cambiando el verbo del «tonight I'm loving you» por otro mucho más picante. 'I like how it feels' terminó de determinar el ritmo frenético del concierto y de endulzar ese brevísimo momento de amargor. Ahí es donde se vio la experiencia del artista, que lleva cien millones de discos vendidos en todo el mundo.

Iglesias repasó su disco 'Euphoria', su primer álbum bilingüe de 2010, interpretando temas como 'Dirty Dancer', acompañado del videoclip con el cantante pop estadounidense Usher, al que se le veía en las pantallas gigantes. Fue momento de intimar con sus 'fans', que habían agotado las 2.500 localidades desde hacía tres días. «Esto va por la Costa del Sol», dijo Iglesias, antes de cantar 'No me digas', uno de los pocos temas que cantó anoche en castellano. Algunas de sus seguidoras de pie en primera fila no pudieron contenerse y se acercaron hasta los pies del cantante con regalos. Uno de ellos, un cuadro, fue recogido en directo por el propio artista. Y entonces llegó el momento de uno de los temas más aplaudidos del artista madrileño, 'Rhythm Divine', un tema que Iglesias iba inmortalizando con las cámaras de foto de algunas 'fans' agolpadas cerca del escenario. La guitarra eléctrica sonó a flamenco, entonces, de repente, para dar las primeras notas de 'Bailamos', de su álbum 'Enrique', otro de sus grandes éxitos de discoteca.

«Buenas noches, Marbella. I need a drink. (Necesito un trago)», dijo, tomando asiento para cantar su balada 'Cuando me enamoro'. Fue una de las interpretaciones de Iglesias más limpias y emotivas de la noche. «A ver, todo el mundo de pie, venga, que estamos de vacaciones», gritó el cantante. Y comenzó una ronda de preguntas: «¿Cuánta gente de aquí es austriaca y cuánta alemana?¿Cuántos hombres? ¿Y mujeres? ¿Y cuántos españoles?». Un estruendo se escuchó, a lo que él contestó: «¡Pues a ver si es verdad!». Y continuó enamorando. «¡Conmigo, Marbella!». Había de todo entre el público: muchas mujeres, también hombres, amigos del cantante, familiares. «Seguridad, por favor, que estamos en Marbella, tranquilos. Dejad a la gente que haga lo que le dé la gana», espetó a un miembro de la seguridad de Starlite.

Espontáneo

Y sacó a un chico al escenario. «Os juro por mi madre que está aquí esta noche que no conozco a Dani de nada», soltó antes de comenzar con las broma. «Dani, tu novia tiene que estar hasta los cojones de mí», le dijo, provocando carcajadas. Y entonces subió Raquel, la novia de Dani, bajo petición del cantante. Y se desmadró del todo la noche. La pareja, de Sevilla, no podía casi ni hablar. «Dani», le decía, «cuando tú tenías 18 y yo 17, canté esta canción, sin la cual no hubiera estado nunca aquí esta noche», explicó Iglesias, antes de comenzar su 'Experiencia religiosa' de 1997, una auténtica experiencia para Dani y Raquel. Sin duda, el mejor momento de la noche. «¿Sabes, Dani? Con cuatro años mi madre me trajo a veranear aquí, a Marbella, donde tuve mi primera novia, que me dejó. Y siempre me acuerdo de ella cuando canto esta canción, que ojalá fuera mía», explicó para introducir el mismo tema que cerró el concierto de 'Una noche movida' de Starlite: 'La chica de ayer', de Antonio Vega. Eufóricos.